[…] Según relata un testigo presencial al rotativo inglés Daily Mail, la pareja de “tortolitos” (es un decir) “empezaron rellenando el formulario en una de las máquinas”. Para entonces, Cage, visiblemente afectado por el vermut gritaba todo el tiempo “¡esta quiere mi dinero!” y “¡su ex es un yonqui, un yonqui!”. Dado el escándalo que estaban montando, fueron conducidos a un cuarto privado, de donde salieron al rato con sus papeles, convertidos en marido y mujer. [Publico]

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