Una profesión muy infravalorada es la de alicatador. Seguramente nunca te hayas parado a pensar las complicaciones que se pueden llegar a encontrar, y las formas de resolverlas. Lo normal es pensar «echa masa, pone azulejo, y a correr», pues… nope.
Una profesión muy infravalorada es la de alicatador. Seguramente nunca te hayas parado a pensar las complicaciones que se pueden llegar a encontrar, y las formas de resolverlas. Lo normal es pensar «echa masa, pone azulejo, y a correr», pues… nope.