— Quique Peinado (@quiquepeinado) September 26, 2019
— Quique Peinado (@quiquepeinado) September 26, 2019
[…] Un total de 10 clubes de la Primera División tienen el patrocinio de Bet365. La casa de apuestas que preside Peter Coates, el también presidente del Stoke City inglés, tiene entre sus clubes patrocinados a escuadras como: Getafe, Athletic de Bilbao, Villarreal, Rayo Vallecano, Real Betis, Huesca, Real Valladolid, RCD Espanyol, Celta, Eibar. […] [diariogol]
Espera… está pasando…
”Están en los barrios obreros para aprovecharse de la gente humilde”. Vaya, no nos olíamos la tostada…
Ya estamos empezando a ver las consecuencias, con gran parte de la chavalada adicta a las apuestas y soltando «la calderilla» en las tragapas. Nos va a quedar un futuro wapo wapo.
Dani Giménez, portero del Deportivo de A Coruña sobre las casas de apuestas. Uno di noi. pic.twitter.com/bdU5jMlfoH
— AntonioMaestre (@AntonioMaestre) June 3, 2019
Pero luego he recordado lo que se hace con el tabaco y el alcohol (cargarlos con impuestos a destajo) y… es coherente con la realidad actual.
Por un lado lo sensato sería prohibir todo lo «muy malo para la salud» pero eso también limita mucho las libertades, y abre melones que igual no queremos abrir. Por otra parte, pienso que esta «ausencia de prohibición» no atiende a una política liberal por parte del PSOE, en plan «uy qué majos son que nos dejan hacer cosas y ser libres», sino a que se prohíbe lo que recauda más estando prohibido. Si nos cargamos el tabaco y el alcohol, adiós a los impuestos derivados de su venta. Y lo mismo con las apuestas, un negocio muy potente y en alza. Incluso con cosas prohibidas que podrían erradicarse fácilmente como los excesos de velocidad en autovía y autopista (límite de velocidad obligatorio en el coche, como en los camiones), se ve claramente la poca intención que hay de solucionarlo, porque los radares dan mucha pasta.
Tuit @PSNPSOE
Pues…
[…] A parte de la resolución, que confirma que el anuncio se salta cualquier norma de buena conducta, el texto es bastante duro en lo que se refiere a estos ‘spots’. Hace un análisis de su contenido y explica punto por punto sus malas prácticas. «El anuncio muestra situaciones de juego repetitivas, con sensación de descontrol y, sobre todo, refleja una actitud compulsiva, que lleva al protagonista a sentir emociones fuertes. A juicio de la Sección, ello se desprende de la repetición (siempre 3 veces) de varias situaciones a la vez al tiempo que, tanto en pantalla como en locución, se incluyen verbos imperativos que trasladan un mensaje de repetición continua del juego y de la apuesta (“entra, entra, entra”, “apuesta, apuesta, apuesta”, “juega, juega, juega”)». […] [Noticia]