Aficionados que molestan, fallos mecánicos, coches y motos que les ponen en peligro… hay muchas razones para que un ciclista profesional se cabree.
Aficionados que molestan, fallos mecánicos, coches y motos que les ponen en peligro… hay muchas razones para que un ciclista profesional se cabree.
Enviado por Fermoso96
Me ha recordado a las matemáticas del doctor maligno.