Los nuevos materiales permiten romper las proporciones de altura/anchura/profundidad, haciendo posibles edificios que antes serían imposibles. Técnicas modernas de compensación de movimientos (mass dampers), y materiales más rígidos, han conseguido que el último piso de estos edificios no te maree más que un barco con marejada.
La nueva moda de edificios muy altos y muy finos que arrasa en New York
single_virality
/home/fino/public_html/pre/wp-content/themes/doberman-child/single.php:82:int 1
single_tags
/home/fino/public_html/pre/wp-content/themes/doberman-child/single.php:86:int 1