Hoy me encuentro con esta noticia:
El gobierno de PDRO argumenta que hay mucho fraude con los despidos (para cobrar el paro, yatusabeh), y que por ello estaría justificada esta medida que cobraría IRPF a las indemnizaciones por despido. Cuando negocias un despido (fraude), la empresa te lo firma si renuncias a cobrar la indemnización que te corresponde por su parte, ya que lo que buscas es cobrar el paro. Otro fraude muy común es pactar la indemnización por despido justa para empalmar (sumada al paro) con la pensión de jubilación a los 65. La magia llega cuando al cobrar IRPF sobre esa indemnización, el gobierno obliga a que la empresa haga un pago REAL al fisco. Así recupera parte de ese paro que no le correspondería al trabajador despedido. Jugada maestra, pensarán ellos. Matar moscas a cañonazos, pienso yo.
No me parece muy de izquierdas hacer pagar a justos por pecadores. Creo que hay más formas para poder hacer un seguimiento de los despidos y conseguir que las indemnizaciones sean ineludibles para las empresas, sin que ello suponga esquilmar a los trabajadores que son despedidos (un grupo especialmente sensible).